Hablar En Publico

La clase que más me aterrorizó tomar fue hablar en público.  Este también es un curso obligatorio que debe tomar si desea graduarse.  Mucha gente desconoce que yo era un joven muy tímido.  Nunca tuve mucha confianza en mí mismo y mucho menos en el área de hablar en público.  Recuerdo que mi primer discurso fue en quinto grado.  Fui elegido para hablar ante toda la escuela debido a un artículo que había escrito sobre concienciación sobre las drogas.  Cuando supe que iba a hablar, me dieron ganas de llorar.  Sentí que me estaban castigando.  Me coloqué detrás de ese podio y apenas podías ver mis ojos.  Dios tenía un plan.  Poco sabía que este sería un lugar muy familiar para mí en los años venideros.  Simplemente me tomó mucho tiempo aceptar el hecho de que Dios me había ordenado para un trabajo.

 Como creyentes en Cristo, es nuestro deber hablar de las maravillas de nuestro Dios.  Debemos glorificarlo de palabra y obra.  Parece que a veces nos gusta mantener esas cosas más en secreto.  He escuchado a gente decir, bueno, no soy un predicador.  Tu vida es una predicación en sí misma.  D.L.  Moody dijo: “Por cada persona que lee la Biblia, hay cien personas que te leen a ti.  Somos epístolas escritas leídas por todos los hombres. Debemos confesar cuando se nos da la oportunidad.  Tendremos muchas de ellas.  Hágalo abierta y públicamente.  No nos avergoncemos de nuestro Dios.  El no ha hecho nada malo para que nos avergoncemos de él.  Él tomó mi vergüenza para que yo pudiera confesar su grandeza y su amor.  Recuerde que el caminar cristiano comienza con una confesión.  El caminar cristiano es voluntario.  Cuando usted lo acepta usted lo hace voluntariamente.  Durante el transcurso del caminar aprendemos a decir ya no es mi voluntad Seńor, si no que sea tu voluntad.

Mateo 10:32-33 RVA

[32] Cualquiera pues que me confesare delante de los hombres, le confesaré yo también delante de mi Padre que está en los cielos. [33] Y cualquiera que me negare delante de los hombres, le negaré yo también delante de mi Padre que está en los cielos.

86 ... Su nombre va al libro de la vida del Cordero cuando Ud. se para públicamente delante de esta audiencia. "Aquel que me confesare delante de los hombres, yo le confesaré delante de Mi Padre, y los santos ángeles. Si te avergüenzas de Mi aquí delante de los hombres, Yo me avergonzaré delante de ti en aquel día."

54-0404E - "Dios Tiene Una Manera Provista"

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